¿ES UN PROBLEMA TENER UN PROBLEMA?
«EL PROBLEMA NO ES TENER UN PROBLEMA, EL PROBLEMA ES NO TENER UNA SOLUCIÓN»
Lo primero que tenemos que ver es qué entendemos por “problema”. Para algunas personas, tener un problema es “estar en una situación de necesidad”. Si es así, nuestro día a día está lleno de problemas, porque todo lo que hacemos a lo largo del día, lo hacemos por satisfacer alguna necesidad, y por consiguiente nuestra vida será absolutamente problemática. ¡No me gusta esta forma de ver la vida!.
Frente a esta visión centrada en el origen, existe una opuesta centrada en el fin, una visión centrada en preocuparse y ocuparse, no de todo, sino de lo que realmente me supone una situación no deseada durante un tiempo mayor del esperado. Es ahí donde hay que dedicar el tiempo y la energía necesarias para cambiar esa situación. Si lo consigo, ¡perfecto!, si no lo consigo, entonces consideraré que tengo un problema.
No debemos confundir “dificultad” para solucionar una situación problemática con “imposibilidad” para solucionar una situación problemática. Todo en esta vida no es fácil, todo nos supone un grado de “dificultad” mayor o menor, desde ir a por pan a la panadería (implica dedicar parte de nuestro tiempo y energía en hacerlo), hasta comprarnos un coche (debemos ganar antes el dinero necesario, o ir a pedir un préstamo), y eso no implica que sean situaciones traumáticas que nos cambien la vida. Sin embargo, hay otras situaciones en las cuales no somos capaces de encontrar una solución al alcance de nuestra mano, al menos de forma accesible, y en estos momentos es cuando debemos buscar y poner en marcha otro tipo de estrategias diferentes a las que normalmente utilizamos.
Tradicionalmente he escuchado que en este tipo de situaciones hay que utilizar la creatividad para acceder a esa solución especial que hará que todo vuelva a su curso normal y eliminemos esa situación no deseada. Esta afirmación tiene muchos matices y, personalmente, considero que no es la primera opción que hay que plantearse, ya que, aunque la utilización de la creatividad tiene grandes ventajas, también son grandes sus inconvenientes o peligros. En cualquier caso, en el momento en el que encontramos esa solución y la ponemos en práctica, empezamos a liberarnos de esa situación.
De qué pasos dar y en qué orden hablaré en otro artículo.